Las deformidades dentofaciales son muy frecuentes, entre 8 a 12 % por ciento de la población mundial presenta algún tipo de desequilibrio relacionado con los dientes y el rostro, es decir, padecen de desarmonías dentofaciales (D.D.), estas las podemos definir como las alteraciones que afectan tanto a los dientes (dento) como a la cara (facial). (Desarmonías dentofaciales más frecuentes).
Alteraciones relacionadas con desarmonias dentofaciales:
- Dificultad para masticar, morder o tragar.
- Dificultad para hablar o pronunciar ciertas palabras.
- Dolor o sonidos en la Articulación Temporomandibular.
- Dolor o alteraciones musculares, en cuello o cara.
- Alteraciones Psicológicas (autoestima, vida instintiva).
- Dificultad respiratoria.
- Dolor de oído.
- Ronquido o desórdenes del sueño.
Frecuencia de aparición de las desarmonias detofaciales
La incidencia de las desarmonías dentofaciales que requieren de Cirugía Ortognática es muy difícil de estimar debido a que debemos considerar un gran número de variables, sin embargo el número de individuos que desarrollarán este tipo de anomalías en el mundo y que a su vez se pueden beneficiar de este tipo de tratamiento está estimado en un 0.7 % de la población mundial.
¿Por qué me debo de operar de desarmonías detofaciales?
Existen un gran numero de razones de por qué se deben corregir las desarmonías dentofaciales. Los beneficios de este tipo de intervención están ampliamente documentados y entre los más importantes podemos mencionar:
- Cuando el tratamiento de ortodoncia por si solo no puede corregir el problema. Existen algunas anomalías congénitas, alteraciones del crecimiento o maloclusiones severas que no permiten, por su dificultad, que la ortodoncia por si sola las pueda corregir.
- Cuando la malposición dental se encuentra asociada con problemas estéticos o alteraciones funcionales moderadas o severas. Las desarmonías dentofaciales tienen una gran influencia en la estética facial, de allí que uno de los beneficios de este tipo de intervenciones es el lograr excelentes cambios en la apariencia. La Cirugía Ortognática al corregir y mejorar las alteraciones óseas y dentales, ayuda a evitar las posibles complicaciones funcionales producto de ellas.
- Para mejorar las funciones masticatorias. Corrigiendo la mordida podemos masticar mejor y evitar los desequilibrios oclusales o sobrecargas dentales, que se traducen en dolor, pérdida de dientes y desarreglos de la articulación temporomandibular.
- Para obtener mejores y más estables resultados a largo plazo. En algunos casos la ortodoncia por si sola logra unos buenos resultados especialmente en los meses posteriores al retiro de los brackets, sin embargo si el caso tenía indicación de ser corregido a través de la ayuda de la cirugía, se empezarán a notar cambios en la mordida, dolores en la articulación o problemas de distribución de las fuerzas de la masticación. Si por el contrario los casos indicados se realizan en conjunto, esto no sucede. La cirugía a menudo ofrece estabilidad a largo plazo y evita el desarrollo de alteraciones funcionales.
- Reducir el tiempo de Ortodoncia. El movilizar los huesos a una mejor posición facilita la ortodoncia y disminuye el tiempo de los tratamientos, siendo lo normal 24 a 30 meses.
- Cambios estéticos favorables. A través de la cirugía y el reposicionamiento de los huesos a una situación más armoniosa se mejora la estética facial del paciente.
- Mejoras en la respiración. En algunas de las desarmonías dentofaciales, especialmente cuando se afectan tanto al maxilar como la mandibula, se encuentran asociados desórdenes respiratorios (alteraciones en el flujo o volúmenes de aire, apnea del sueño, etc.) La corrección de la maloclusión mejora en muchas ocasiones esta patología.
- Mejoras en el habla. La adecuada pronunciación de las palabras requiere de una correcta posición de los labios, los dientes, la lengua y la mandíbula, la cirugía ortognatica mejora la forma de hablar, en algunas ocasiones se puede requerir la ayuda de un terapista del lenguaje.
- Mejora y posiblemente se evitan los desarreglos de la Articulación Temporomandibular a largo plazo. Al colocar los dientes en una posición anatómica y fisiológica adecuada la articulación trabaja y funciona mejor.
¿Quién debe diagnosticar este tipo de desarmonías?
Las primeras manifestaciones de estas desarmonías son las maloclusiones, seguidas de alteraciones en las funciones (respiración, deglución, fonación, articulación, musculatura cervico facial, etc) y posteriormente alteraciones en el desarrollo y crecimiento que alteran finalmente la estética.
Por lo tanto el inicio del tratamiento dependerá del momento del diagnóstico:
- Diagnóstico Precoz: es realizado cuando su odontólogo posee el conocimiento necesario para darse cuenta de futuras alteraciones de la oclusión y desproporciones en el desarrollo óseo facial.
- Diagnóstico temprano: es realizado por odontólogos, ortodoncistas, familiares cercanos, médicos de cabecera.
- Diagnóstico tardío: puede ser realizado por cualquier profesional de la odontología o medicina, pero generalmente son los propios pacientes (jóvenes adultos entre los 14 y 24 años) que como resultado de sus afectaciones y dolencias buscan ayuda o información.
Desarmonías dentofaciales más frecuentes
Detallamos seguidamente las desarmonías dentofaciales más comunes:
- Exceso anteroposterior de la mandíbula (Prognatismo o Mandíbula grande). Se caracteriza por que la persona tiene una mandíbula de gran tamaño y sus dientes inferiores muerden por delante de los dientes superiores.
- Deficiencia anteroposterior de la mandibula (Retrognasia o Mandíbula Pequeña). La mandíbula es de menor tamaño, los dientes superiores esconden totalmente a los inferiores, el mentón es muy pequeño y la barbilla se encuentra muy cerca del cuello.
- Exceso maxilar vertical (Cara larga). El tercio inferior facial es muy largo, por lo que le es imposible al paciente cerrar los labios, muestra los dientes constantemente, y quizás el más notable de todos, que consiste en mostrar las encías de manera exagerada cuando se sonríe.
- Deficiencia anteroposterior del maxilar (Cara de viejo) El tercio medio facial es aplanado principalmente en el área de las mejillas y labio superior, parece que la mandíbula fuera grande pero en realidad es de tamaño normal. Los dientes están escondidos, no se ven cuando se sonríe, la nariz es prominente y está hacia abajo.
- Asimetría facial. La cara es desigual, la línea media de la cara y de los dientes no coincide, no están alineados, uno de los lados de la cara es más grande, más ancho o más largo que el otro, la boca está torcida o el mentón se encuentra hacia un lado, la mordida está cruzada de un lado.
- Mordida abierta. La persona no puede morder con sus dientes en la porción anterior de la boca, los dientes superiores no tocan con los inferiores. Esta deformidad se debe principalmente a hábitos parafuncionales, como la succión del pulgar o un hábito de mala posición de la lengua durante el acto de tragar (hábito de deglución atípica)